BANCARROTA
256-489-2012Bancarrota
La quiebra o bancarrota no es la solución para todas las personas endeudadas. Dicho esto, si alguna de las siguientes situaciones es la suya, al menos debería considerar una consulta con nuestra firma para ver si la quiebra es la opción correcta para usted.
La Bancarrota o Quiebra puede ser la alternativa si usted:
- Tiene que poner las necesidades diarias como comida y gasolina en tarjetas de crédito pero solo cuenta con lo suficiente para hacer los pagos mínimos mensuales de su tarjeta.
- Está utilizando una tarjeta de crédito para pagar otra, ya sea mediante un avance en efectivo o una transferencia de saldo. Al final, su deuda no baja y sus tasas de interés suben.
- No ha hecho varios pagos en su tarjeta de crédito y como resultado las tasas de interés se han disparado y le están llamado para que pague.
- Ya ha recortado sus gastos pero aún no le alcanza el dinero para llegar hasta el fin de mes.
- Trabaja tiempo completo y además parcial pero aún no puede llegar al fin del mes.
- Su salario ha sido embargado o está en peligro de ser embargado porque un acreedor tiene o está buscando un juicio en su contra.
- Ha tomado dinero de sus cuentas de jubilación o de ahorros universitarios de sus hijos para pagar sus deudas, o está pensando en hacerlo.
- Lo ha intentado todo, pero aún no puede reparar su deuda.
- Los acreedores lo acosan constantemente y el estrés de su deuda está afectando su vida cotidiana, su capacidad para concentrarse en el trabajo o la relación con su familia.
En qué capítulo del código de quiebras puede usted declararse en Bancarrota?
Capitulo 7
A menudo denominada quiebra para un “nuevo comienzo”, es la más común. El Capítulo 7 suele ser menos costoso que el Capítulo 13 y lleva menos tiempo; por lo general, solo 4 meses desde el principio hasta el final. En una bancarrota de Capítulo 7, se eliminan la mayoría de las deudas no garantizadas. Esto significa que la deuda no está garantizada con un bien personal o un bien raíz. Las deudas de tarjetas de crédito y médicas son dos tipos comunes de deudas no garantizadas. En esta clase de Bancarrota es posible que usted pueda conservar todos o la mayoría de sus bienes. En la mayoría de los casos solo tiene una audiencia breve con el administrador de la bancarrota o con el Juez. A esto se le llama Junta de Acreedores o Junta 341. A pesar del nombre, es muy raro que aparezcan los acreedores. Unos meses después de esta reunión, usted podría recibir el beneficio de la bancarrota.
Capitulo 13
En algunas situaciones, una bancarrota del Capítulo 13 es una mejor opción. Puede decidir declararse en bancarrota bajo el Capítulo 13 si la “prueba de recursos” de la bancarrota muestra que no califica para una bancarrota del Capítulo 7. Esto ocurre cuando usted gana demasiado dinero para el área en la que vive. El Capítulo 13 también puede ser una mejor opción si el tipo de deuda con la que está luchando es algo que no se puede cancelar en un Capítulo 7 como por ejemplo una deuda tributaria o de manutención de niños atrasada; en un Capítulo 13, esa deuda se paga durante el transcurso de la bancarrota.
El Capítulo 13 también puede ser adecuado para usted si tiene una casa o un automóvil que le gustaría conservar, pero se ha atrasado en los pagos. El Capítulo 13 se conoce como la bancarrota de un “asalariado” porque debe tener un trabajo en el que pueda demostrar que los pagos mensuales se realizaran en los próximos tres o cinco años de pagos del plan. La mayoría de las personas que se declaran en bancarrota del Capítulo 13 no completan el plan de pago y su caso se desestima por no realizar los pagos del plan.
En la bancarrota del Capítulo 13, su abogado lo ayuda a hacer un plan para hacer los pagos de su deuda durante tres a cinco años. En esta clase de bancarrota usted tiene una reunión de acreedores, como en el capítulo 7 y también una comparecencia ante el juez del tribunal de bancarrotas para confirmar su plan de pago. La “suspensión automática” entra en vigencia tan pronto como se declara en bancarrota del Capítulo 7 o del Capítulo 13, lo que evita que sus acreedores intenten cobrarle las deudas.